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julio 24, 2024
El oro es un metal precioso que, con el tiempo y el uso, puede perder su brillo y sufrir daños si no se cuida adecuadamente. En este artículo te traemos una serie deconsejos prácticos para limpiar las joyas de oro y mantenerlas en perfectas condiciones el máximo tiempo posible.
Puede parecer incómodo quitarse todas las joyas cada vez que vayas a lavarte las manos o ducharte, pero con el tiempo lo agradecerás. Si no lo haces, el jabón se puede quedar dentro y formar una pasta negra que levantará las piedras y hará que se desprendan.
Usar cosméticos con las joyas puestas es otro gran error. Esto incluye perfumarte, aplicarte productos en el pelo o utilizar cosméticos como cremas hidratantes. Lo más adecuado es que las joyas sean lo último que te pongas al salir de casa para evitar el contacto con estos productos que dañarán tus joyas.
Guarda las joyas para hacer todas las tareas del hogar y practicar jardinería u otros quehaceres. Los productos químicos que se utilizan para llevar a cabo estas tareas producen daños en el acabado de las joyas, incluso podrían deformar la pieza si se tratara de un anillo delicado.
Despréndete de las joyas de oro para hacer ejercicio en el gimnasio o practicar cualquier deporte que requiera el uso de las manos. Usar anillos mientras practicamos deporte, especialmente deportes de raqueta y contacto, acabará provocando golpes, arañazos y abolladuras en tus joyas de oro.
Guarda las joyas para bañarte o nadar en la playa. En primer lugar, en el mar es muy probable que pierdas gargantillas, cadenas e incluso anillos, dado que por el frío se nos encogen los dedos alrededor de un par de tallas. Además, debes tener en cuenta que la arena raya el oro.
Quítate las joyas si vas a cargar mucho peso, ya sean las bolsas de la compra, el equipaje, cajas de mudanza, etc. Como hemos dicho, el oro puede abollarse si ejercemos mucha fuerza sobre él.
Limpiar el oro con agua y bicarbonato, hervir las joyas, sumergirlas en vinagre o limpiarlas con pasta de dientes, son algunos de los muchos remedios caseros que usan muchas personas para cuidar sus joyas de oro. Sin embargo, todas estas soluciones pueden rayar y opacar las joyas. Además, si tus joyas tienen piedras preciosas, estos métodos pueden aflojar su sujeción y provocar que se desprendan.
Almacena tus joyas en un joyero de tela, limpio y seco, que tenga compartimentos para mantener tus joyas de oro separadas. Si las guardas juntas, pueden sufrir pequeños golpes que provocan arañazos o pequeñas abolladuras.
Hacer una limpieza de joyas una vez al mes no supondrá un gran esfuerzo y hará que tus piezas duren perfectas durante más tiempo. Para limpiar el oro es necesario un cepillo con púas suaves, jabón desengrasante y una gamuza.
Cabe destacar que lavarse las manos con las joyas, es distinto a limpiarlas. Para que el proceso no sea dañino hay que usar una gota de jabón en un cepillo suave, con el que frotaremos en interior y exterior de la joya. Después, haremos un aclarado intenso con agua y finalmente la secaremos bien con la gamuza, de modo que nos aseguremos que no quedan restos de jabón en la pieza.
Aun que cuidemos nuestra joyas están sufriran desgaste por el uso. Para que luzcan como nuevas, debemos hacerles un mantenimiento cada cierto tiempo.
El mantenimiento varía mucho según el color del oro, la pieza de joyería y las piedras que tenga incrustadas. En el caso del oro blanco, podrás aplicar una capa de rodio una vez al año para mantener el brillo original.
Por otro lado, el oro amarillo tiene un mantenimiento más sencillo. Cuando observes que está rayado, únicamente necesitarás llevarlo a la joyería para que lo pulan.
Siguiendo estas pautas de mantenimiento, tus joyas de oro se mantendrán en excelente estado y conservarán su valor a lo largo del tiempo.
Nosotros te ofrecemos soluciones para tus joyas de oro, haciendo todo tipo de reparaciones y mantenimientos, así como más consejos para conservar tus joyas en buen estado.
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