Albina y su marido, Pablo, abrieron su primera joyería en Navarra en el año 1969. Albina era una mujer apasionada, con gusto por la joyería, y gran elegancia. Disfrutaba de su trabajo y de pasar tardes enteras asesorando a las novias e invitadas que se casaban con sus joyas. Era, sin duda el alma de cualquier fiesta y nunca le faltó una copa de champán para brindar.

Dinastía Albina es mucho más que una marca de joyas para novias e invitadas. Es una extensión del legado de Albina,que siempre puso a la familia y a las cosas que de verdad importan en primer lugar.

Con esta nueva marca, la familia de joyeros, propietarios de BIJOYA, y marca MONTREY, sigue el camino de su fundadora, ofreciendo piezas únicas para que cada mujer se sienta especial en su día más importante y en los que están por venir.

Nuestra misión es que te sientas como una reina en las celebraciones más importantes a través de piezas inspiradas en la realeza.

Queremos que lucir nuestras joyas sea sinónimo de celebración, que podáis elevar cualquier look y sentiros atractivas, poderosas y únicas en los momentos más importantes de vuestras vida.